
Y así, después de tanto sufrimiento, tanto dolor y tanta muerte, todo había terminado.
No sé si podré salir vivo de este lugar... Estoy aquí, sentado en el suelo, con la cabeza entre las manos, llorando. La espalda contra la fría pared agrietada y llena de agujeros causados por las balas disparadas hace escasos minutos. Pero lo peor, es que los cadáveres yacen a mi alrededor, muertos definitivamente. Han intentado matarme… Fuera, donde la pesadilla aún existe, hay más como ellos, golpeando con furia la madera mientras gimen, para poder llegar hasta mí… Sé que lo lograrán, antes o después me alcanzarán. La poca y tambaleante luz que emana de la lámpara, proyecta sombras en la pared y el suelo, sombras malignas como lo son aquellos seres que en forma de horda, se precipitan contra la puerta.
Escucho un estallido de vidrios: finalmente han entrado. Agarro con fuerza la pistola y apuntándome a la sien, todavía con lágrimas en los ojos, aprieto el gatillo. Ha llegado el momento…
Es tan solo un microsegundo, pero mi mente regresa veinticuatro horas atrás; al último día de la humanidad...
Hola, ¡me gusta mucho! Pásate para leer mis relatos si quieres :)
Interesante, suba más de esa.-
Muchas gracias Vautrin, si quieres leer la historia original puedes hacerlo entrando en mi blog: http://pandemiathelastday.blogspot.com.es/
Me ha gustado. buen principio o final :)
Me gusta mucho! Yo tambien tengo un relato en concurso. Si puedes, pasate y si te gusta....ya sabes! Un saludo y nos leemos