#1
Salgo de casa y un hombre en la puerta me espera,
me está apuntando la calma con un arma
y con ella me indica que de rodillas me ponga.
Estas caen al suelo, vegetal; yo obedezco;
me dejo llevar por su silencio y opacidad.
Su pistola color negro mate
le suplica al dedo posicionado
en el gatillo que me mate.
Avanza unos pasos hasta alcanzarme,
el cañón lo apoya...